Cerrado temporalmente por los trabajos de puesta en valor y mejora.
En el cerro del Castillo de Alhama de Murcia se levanta una fortaleza de origen islámico, de los siglos XI y XII, que se encuentra sobre un escarpado cerro que domina la localidad y con unas condiciones favorables para controlar el itinerario del Valle del Guadalentín. El castillo, formó parte de las fortificaciones de frontera, con el reino de Granada, al sur, y con el de Aragón, al norte. Fue declarado BIC (Bien de Interés Cultural) en 1985.
La fortaleza se divide en dos espacios diferenciados: un espacio político y militar; y otro destinado a refugio y residencia de la población. Destaca la Torre del Homenaje con alzado completo y pinturas decorativas en su interior. Mediante los restos arqueológicos encontrados en el castillo, se han documentado las fases de época musulmana hasta mediados del siglo XIII. En el último tercio del siglo XIV, el castillo y la villa de Alhama pasó a pertenecer como señorío a la familia Fajardo, junto con otras poblaciones de la Región. Tras la coonquista de Granada, el castillo dejó de ser una fortaleza de frontera del valle y paulatinamente fue siendo abandonado, comenzando el proceso de deterioro con el paso de los siglos.
En la actualidad, se están llevando a cabo
trabajos de restauración y puesta en valor, con el fin de ofrecer al público una visita
turística y didáctica por el recinto. Por este motivo, se ha suspendido
temporalmente el programa de visitas guiadas y visitas organizadas para grupos.