La crisis sanitaria por COVID 19 impide la celebración de los desfiles procesionales en 2021.
La primavera en Alhama, despierta con una explosión de sentimientos en los que se reflejan la historia, la tradición y la cultura de un pueblo que, ha sabido manifestar en el incomparable escenario de la calle, todo el drama de la Pasión de Cristo, en un festival de colores, olores, sabores y sonidos. La Hermandad de Ntra. Señora de los Dolores y Soledad (Paso Negro) da inicio a una semana plena de sentimientos, de añoranzas y de expectación con la procesión de Viernes de Dolores. Hay que destacar el rico patrimonio de las cofradías y hermandades de Alhama que consiguen sacar en las distintas procesiones más de cuarenta pasos distintos.
La archicofradía de nuestro Padre Jesús Nazareno (Paso Morado), recorre las calles del pueblo con las últimas luces de la tarde, en un claroscuro susurrante. Avanzada la noche, dentro de un espectacular y sobrecogedor silencio solamente roto por alguna saeta y el rumor silencioso de los tambores, la cofradía de San Juan Evangelista (Paso Blanco), avanza en la oscuridad entre el olor de la cera quemada y el perfume de las flores. Las calles se llenan del serpenteante desfile de colores de túnicas y flores.
Los terciopelos y rasos rojos de la Hermandad de La Santa Mujer Verónica (Paso Colorao), junto a los pasos morados, blancos, negros y azules de los cofrades, quedan envueltos en el suave aroma de las flores que adornan profusa y artísticamente los tronos. Cada año se adquieren miles de flores para crear artísticas composiciones florales en los tronos, verdaderas obras de arte, que se funden con las imágenes que portan los diferentes pasos.
Terciopelo y raso azul. La cofradía de Santa María Magdalena (Paso Azul) en las calles de Alhama, indica que estamos en el pórtico de la parte central de nuestros desfiles: su tradicional y delicada ornamentación floral da un toque de color a la noche anterior del plenilunio de la primavera. Noche de olor y de Pasión. Nos acercamos a la noche de viernes santo con el sentimiento y el dolor del santo entierro, pero también con la esperanza, el amor y la paz.
El domingo de resurrección supone para Alhama el día más espectacular y alegre de nuestra Semana Santa. Bien temprano, a la luz del sol brillan los terciopelos bordados en oro de las cinco cofradías y hermandades con sus imágenes a hombros, acompañadas de sus bandas de música que desde itinerarios distintos confluyen en el centro de la ciudad; miles de paisanos y visitantes esperan con emoción, el momento álgido de los desfiles pasionales, el triunfo de la vida sobre la muerte: el Encuentro de Jesús resucitado con su Madre Dolorosa, acompañados de San Juan, la Verónica y María Magdalena. Es la emoción de todo un pueblo entorno a una fiesta de colores, olores, sabores y sonidos.
Declarada de Interés Turístico Regional en marzo de 1.995.
Se recomienda asistir a los Encuentros, tanto el que evoca el Encuentro de Jesús con su madre en la calle de la Amargura, en la mañana del Viernes Santo, como el que rememora el encuentro de Cristo Resucitado con María en la mañana del Domingo de Resurrección.